Luego de los retiros del 10% de los ahorros previsionales de las AFP, vivimos un boom del consumo que potenció las ventas de muchas tiendas y multitiendas, como Corona, quienes lograron adelantar el proceso de pago a sus acreedores y dar por cerrado su proceso de reorganización judicial, según reportó el Diario Financiero. 

Proceso que comenzó en agosto de 2020 con la presentación de solicitud de reorganización para evitar la quiebra, debido a los efectos que generó tanto la crisis social como la pandemia. Dos meses después se aprobó el acuerdo de reorganización, que tenía previsto un proceso de pago de créditos de 7 años. Créditos bancarios que sumaban más de $41.601 millones y que tenía como mayores acreedores a Santander, Security, Penta Vida, Scotiabank y Consorcio.

“La compañía logró ahorrar los recursos suficientes para amortizar extraordinariamente alrededor del 50% de dichos créditos sujetos al acuerdo de reorganización judicial, consistentes en acreedores financieros garantizados y valistas”, informó a la justicia el abogado Nelson Contador, a cargo del proceso. 

Según lo publicado por el Diario Financiero, Contador dijo que además, se presentó la posibilidad de que la compañía consiguiera el financiamiento necesario para amortizar el saldo restante, entre el porcentaje mencionado anteriormente y lo ya pagado hasta ahora, por un crédito sindicado por $21 mil millones.

Al pedir la reorganización la empresa había informado que el pasivo consolidado del grupo alcanzaba los US$90 millones, de lo cual 64% eran compromisos financieros, 24% deudas con proveedores y 12% cuentas por pagar con entidades relacionadas, como arriendos de locales de propiedad de los Schupper.