Minera Tres Valles enfrentaba un proceso de liquidación forzosa por pasivos de alrededor de US$50 millones, eso hasta que dos fondos de inversión ingleses, Javelin y Kimura, se hicieran cargo de la deuda.

Además, los inversionistas en junio abrirán poderes de compra para adquirir cobre a pequeños mineros de la zona. Es más, según reportes del Diario Financiero, Javelin y Kimura han inyectado cerca de US$1 millón para que pequeños mineros de la zona exploren en búsqueda de nuevo mineral y están en negociaciones con unos 100 productores de las localidades de Salamanca e Illapel que venden lotes de más de 300 toneladas con mineral de cobre.

Por otro lado, la minera se prepara para enviar una declaración de impacto ambiental para extender la vida útil del mineral hasta 2035.

Las razones de la crisis

En diciembre de 2019, Tres Valles logró cerrar un financiamiento que ascendió a la suma de US$45 millones, pero que en el fondo solo significó la entrada de recursos efectivos por US$10,2 millones, restando el pago de líneas de créditos vigentes, gastos de emisión del crédito y dejar una reserva como depósito en garantía solicitada por el mismo crédito.

Por otro lado, el proceso usado para el tratamiento de los minerales tiene una cinética promedio de 250 días, lo implica que, en una etapa de incremento de la producción, hay un alza de productos en proceso, lo que genera presión sobre la liquidez.

Además, entre 2017 y 2019 los proyectos fueron financiados por flujos provenientes de la operación, créditos con la empresa matriz en Canadá y por crédito de proveedores principalmente vía factoring.

En paralelo, minera Tres Valles apuntó a los efectos que le habrían generado la sequía y la pandemia, eventos que, señaló, obligaron a reducir la producción y los llevaron a comenzar una reorganización en agosto de 2020.

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