Los reconocidos Supermercados Montserrat cerraron sus locales en julio del año pasado, pero aún mantienen millonarias deudas con una serie de acreedores. Para cumplir con estas obligaciones, están desarrollando una reorganización judicial que considera una fusión entre Montserrat (SMSA) e Inmobiliaria Santander S.A. (ISSA), según lo publicado por el Diario Financiero.

Recordemos que la inmobiliaria es dueña de varios de los locales en los que operó Montserrat y que la fusión tiene como fin consolidar los activos y pasivos de ambas compañías en un único deudor, ya que ambas empresas comparten acreedores financieros, avales, codeudas solidarias y garantías hipotecarias.

En el proceso de reorganización judicial, Montserrat informó pasivos por $121.726 millones al 28 de febrero de este año y entre sus principales acreedores están BTG Pactual y los bancos De Chile y Santander, además de Tanner.

¿Cómo avanza el proceso de reorganización?

El acuerdo propone la venta ordenada de todos los bienes inmuebles actualmente de propiedad de ISSA, una vez que se produzca la fusión con Supermercados Montserrat. Luego, se apunta a pagar a los acreedores con el producto de la venta ordenada de parte de los bienes de la empresa fusionada.

El pasado 11 de agosto, y según lo publicado por el Diario Financiero, el veedor designado en el proceso de reorganización de Montserrat, presentó un informe a la justicia donde señaló: “Este veedor puede establecer que la propuesta es susceptible de ser cumplida, y es favorable para los acreedores del presente acuerdo de reorganización, bajo condición de cumplirse las observaciones planteadas”.

Es decir, la propuesta establece la continuación efectiva y total del giro de la empresa fusionada, con lo que se generarán flujos destinados a pagar el saldo de los créditos que no sean pagados con la venta de los inmuebles encargada al interventor que se designe.

Por ello, la empresa tendrá un giro exclusivamente inmobiliario porque no se explícita la continuación de un giro de supermercados. La empresa deudora tiene que definir el destino de los bienes muebles y vehículos de su propiedad, y si serán objeto del proceso de venta que se regula en la propuesta.