La cadena de pizzerías Papa John’s Chile, es de propiedad del empresario Nicolás Ibáñez y tiene 4.800 trabajadores y 145 locales en todas las regiones de Chile, menos Aysén.

Hoy se enfrentan a una crisis: tienen una deuda bancaria que alcanza los $53.000 millones. Sus principales acreedores están representados por el Banco BTG Pactual y luego, en menor proporción, por los Bancos De Chile, BCI, Santander, BICE y Security, según lo publicado por el Diario Financiero.

Si bien la compañía llevó a cabo una serie de acciones que lograron recuperar más del 50% del Ebitda que se hubiese perdido, las condiciones de flujo de caja actuales no permiten cumplir oportunamente con los pagos adeudados a los acreedores.

La crisis y el plan de acción

En su petición a la justicia la firma señaló que, a comienzos del 2022 sabían que se aproximaba un contexto desafiante. Sin embargo, la realidad fue más dura, y la inflación y el debilitamiento del peso fueron mucho más altos a los esperados. A esto se le suma el mayor costo de la cadena logística global, que aún no se recupera de los efectos de la pandemia.

Como respuesta, se generaron tres alzas de precio, llevándolos al “rango máximo tolerable” por los consumidores según los estudios llevados a cabo por la propia empresa. Además, se revisaron las recetas buscando ahorros en ingredientes, sin impactar la calidad de los productos.

Además, se llevó a cabo un plan promocional más agresivo y una revisión profunda de promociones y canales, para optimizar el margen de ventas de cada producto y mover volumen hacia el retiro en tienda, que es el canal más rentable.

A pesar de este esfuerzo, la firma aseguró que resulta indispensable iniciar un procedimiento de reorganización judicial, para poder lograr distintas condiciones de pago de sus deudas.

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